Sin duda alguna, la necesidad de dejar de depender de los precios del petróleo para garantizar la seguridad energética de la nación se ha hecho eco en todas las esferas del país. Cualquiera sea la motivación, reducir el impacto del petróleo en el sistema de vida tiene que ser la prioridad.
El U.S. Naval Research Laboratory anunció ésta semana que está desarrollando un proceso para extraer del agua de mar el dióxido de carbono (CO2) y producir gas hidrogeno (H2) y subsecuentemente, a través de un proceso catalítico, convertir el CO2 y el H2 en biocombustible para jets.
Señalan que pueden producirlo de tal forma que será tan barato como la gasolina regular. Los estudios iniciales proyectan que el combustible generado usando este proceso costará tan poco como entré $3 y $6 el galón.
Recargar combustible en el mar actualmente cuesta toneladas de dinero porque todos estos combustibles requieren una cantidad extra de combustible para ser entregados. El año pasado la Armada entregó alrededor de 600 millones de galones de combustible a sus buques en el mar. Se imaginan cuánto petróleo se necesitó para transportar estos 600 millones?
Refiriéndose a esta tecnología emergente, el químico de investigación marina Heather Willauer de la Armada dijo en el comunicado: “La recompensa potencial es la capacidad para producir el combustible JP-5 en el mar reduciendo la cola de la logística en la entrega de combustible con ninguna carga ambiental y aumentando la seguridad energética y la independencia, de la Armada”
Un paso al frente por La Seguridad Energética de La Nación.
Foto: (U.S. Navy Military Sea Lift Command)